Difícil, a veces pareciera que los días son tan oscuros que tenemos miedo de caminar hacia la claridad del sol, y lo digo porque me ha tocado en varias ocasiones enfrentarme a ciertos tiempos en los que las situaciones nublan tanto el cielo que la obscuridad es lo único que se puede ver y pues generalmente y por instinto uno tiende a comenzar a dar pasos precavidos, a poner las manos al frente tratando de encontrar algún apoyo y a mover los pies lo mas despacio y cauteloso que se pueda tratando de no toparse con un obstáculo, como si con la penumbra viniera también una serie de obstáculos en el camino, cuando en realidad el camino esta igual de despejado como cuando dejamos de verlo, pero la obscuridad ciega también nuestro pensamiento y queremos avanzar sintiendo cierta confianza en que no caeremos o nos lastimaremos o nos saldrá algún animal o algún monstruo de ultratumba, pero como decía antes, esa obscuridad del pensamiento y de la mente no nos hace darnos cuenta de que el camino esta ahí, solo que no lo vemos, y lo que hay que hacer es dar pasos de Fe, o lo que es lo mismo, caminar confiando en que nuestros pasos van por la senda correcta.
Últimamente he estado caminando así en cierta forma y debo decirles algo, es lo mas difícil que alguien puede hacer, caminar confiando en que todo saldrá bien es tan complicado y cansado, no físicamente, sino espiritualmente, el espíritu se cansa, llega un momento en el que quisieras simplemente dejar de caminar así, pero ¿de eso se trata no?, que obtendrás como resultado?, habrás llegado a la claridad. Los que caminan tratando de sostenerse por si mismo no miran al frente, solo ven lo que quieren ver, los que caminan dando pasos de Fe ven al frente y ven la luz, porque si existe la claridad dentro de tanta obscuridad es obvio que se tiene que ver, y ¿como llegaremos a ella?, siguiéndola.
Pienso luego existo dijo alguien famoso.
Saludos